Millonario robo en Santa Rosa: La policía sospecha de un "entregador"

Mientras no hay rastros del vehículo ni de los dos sospechosos vestidos de traje, la Brigada de Investigaciones trabaja firmemente sobre la hipótesis de que el golpe fue ejecutado con información precisa de un "entregador".

El monto del botín sustraído -equivalente a unos 500 millones de pesos-, sumado a la escalofriante metodología utilizada por los delincuentes, son los indicios clave que refuerzan esta línea de investigación.

El entorno de la víctima

Fuentes cercanas a la investigación confirmaron este viernes a El Diario que el principal foco de las pesquisas se centra en el conocimiento que los asaltantes demostraron tener sobre la víctima y el lugar donde se guardaba el dinero.

El hecho de que los dólares estuvieran ocultos en una "lata de plástico de cinco litros", sin ser detectados en un lugar común, sumado a la extrema violencia utilizada, sugieren que los ladrones llegaron con una certeza casi absoluta sobre la ubicación exacta de la improvisada "caja fuerte".

El relato de la víctima detalla que los dos hombres, vestidos con trajes y camisa blanca, la inmovilizaron con sábanas en el primer piso y la amenazaron con un cuchillo en el cuello para presionarla a confesar la ubicación del dinero. Este nivel de coerción apunta a que el objetivo no era un simple robo al azar, sino la obtención de la millonaria suma.

Por ahora, sin detenidos

Por el momento, no se registraron detenciones y las diligencias se concentran en el relevamiento de cámaras y el seguimiento del vehículo identificado: un Fiat Cronos de color gris, con vidrios polarizados y sin patente visible, que habría sido utilizado para la fuga.

El asalto, que se consumó bajo la modalidad de "entradera" cerca del mediodía de ayer y fue primicia de El Diario, implicó que los delincuentes simularan ser visitantes antes de ingresar por la fuerza ante la negativa de la mujer. Además del cuantioso botín en billetes de 100 dólares de serie nueva, los ladrones sustrajeron un teléfono celular Samsung Note 9.

La causa se maneja con absoluto hermetismo oficial, pero la Brigada de Investigaciones (UR-I) y la Agencia de Investigación Científica (AIC) mantienen un intenso trabajo de campo para intentar identificar el nexo entre el entorno de la víctima y la información privilegiada que permitió la ejecución de este robo de características inéditas en la capital pampeana.